Tejos en Panizares Hagin - Yew





        









































                 Panizares(Burgos)



La tradición y la sabiduría popular nos han alertado sobre las maldades de esta especie de gimnosperma, pariente lejana de pinos, abetos y cedros, pues es extremadamente venenosa. Su poder tóxico se ha exagerado de tal forma que hasta el médico de las tropas de Nerón, Dioscórides, indicaba que: “Ofende gravemente a los que a su sombra duermen o asientan y aun muchas veces los mata”. El veneno del Tejo está presente en todas las partes de la planta a excepción de un pequeño anillo carnoso que rodea la semilla llamado arilo.
La gran longevidad del Tejo, junto con su lento crecimiento, dotan a su madera rojiza de una dureza casi metálica muy apreciada por ebanistas y torneros. De madera de Tejo son algunos sarcófagos de faraones de hace más de 4.000 años, así como lanzas y picas que los romanos llamaron taxus para certificar su origen e, incluso el potente arco largo inglés que habría usado Robin Hood, estaba fabricado con esta madera que puede ser curvada al vapor. Tal dureza, proporciona a este material unas propiedades acústicas excepcionales que dio lugar a la fabricación de castañuelas tan valoradas por su calidad como ilustra la canción popular: “Las castañuelas de tejo son de mi hermano Matías, cuando mi hermano se muera, las castañuelas son mías”. Durante mucho tiempo se justificó la explotación de grandes extensiones de Tejeras para la obtención de su preciosa madera y la desaparición de una especie tan dañina por su veneno. Pues bien, en los años noventa se descubrió que precisamente el Taxol, esa sustancia que lo hace tan “malo” y venenoso, resultaba ser un tratamiento eficaz en los cánceres de mama, colon, cérvix uterino y melanomas. Para la obtención de este medicamento contra el cáncer, solo precisamos de unas pocas hojas del árbol. Un árbol del que muchas poblaciones han sido llevadas casi a su total desaparición a lo largo de la historia: árboles que habían visto pasar a romanos, godos y árabes fueron talados pero… Siempre tendremos unas bonitas castañuelas.
Botánica:  Curiosidades, Historias y Leyendas

Árbol entre tejos

            Panizares (Burgos)

La selva del Amazonas es la más grande de todo el mundo y es uno de los lugares más ricos en biodiversidad. Tan solo desde el año 2010 se han descubierto más de 400 especies nuevas en la selva del Amazonas. Además es la mayor fuente de oxígeno del planeta y la reserva natural de donde sale aproximadamente el 25% de los ingredientes fundamentales de los medicamentos de todo el mundo.
La Amazonia es un lugar inmenso, realmente inmenso, ¿sabes cuánto ocupa exactamente? ¡7 millones de kilómetros cuadrados! Si la selva del Amazonas fuese un país por sí mismo, sería el noveno más grande del mundo.
Según un estudio de docenas de biólogos y conservacionistas, la selva del Amazonas es hogar de 390 mil millones de árboles de 16 mil especies diferentes. Aproximadamente la mitad de los árboles de la selva corresponden a tan solo 227 especies, es decir un 1.4%. Impresionante, ¿no lo crees? ¿Cómo crees que lograron llegar a esas cifras?

Fuente :Ojo curioso

Secuoyas en Cabezón de la Sal Sekuoia - Sequoia


                                     Cabezón de la Sal (Cantabria)

La secuoya llamada Madre del Bosque  medía casi 30 metros de contorno cuando decidieron cortarla a finales del siglo XIX. Tardaron cerca de un mes en serrarla, pero no pudieron derribarla. Finalmente cayó por la fuerza del viento y el estruendo que causó fue tan grande que se oyó a más de 20 kilómetros de distancia.
Las secuoyas son tan antiguas como los dinosaurios: sobrevivieron al jurásico  hace 199 millones de años. Pueden pesar cerca de las 1.400 toneladas, sin contar las raíces, que representan el 40 % del peso total. Se han encontrado ejemplares de secuoyas que han alcanzado una altura de 122 metros.